Hace casi 6 meses ni se me había pasado por la cabeza. Una decisión accidental o bien el Destino hizo horas extras y me llevó hasta allí.
La verdad que no nací con un bongo o un timbal bajo el brazo aunque si con ritmo bailongo en el cuerpo.
Parece como si al bailar se me fueran las preocupaciones: «Quien baila, su mal espanta«.
Y la pregunta que me hago es:
¿POR QUE ES TAN ADICTIVA LA SALSA?
-¿Que tiene la salsa que engancha, que convierte a «profanos» en «creyentes»?
-¿Es su filosofía musical tan vital que nos hace vivir la vida al máximo y sentirnos a todos como niños curiosos «absorbedores» de música y bailes?
-¿Será por la percusión que incita moverte?
-¿Será por el estado de trance en que te sumerge al bailar?
-¿Es por el baile tan sensual a veces, visceral, tan humano… que provoca admiración?
-¿La variedad de «sabores» que nos contenta a todos en determinado momento del tiempo?
Me refiero a «sabores» al hecho que Salsa no hay más que una y es a lo que la «Mamma» Celia Cuz dijo en su día y con sabiduría guajira-sintética de que «(…)la salsa es un conglomerado de estilos -mambo, chachacha, son cubano, guaguancó, pilón(…)»
A mí hay momentos en que prefiero una salsa dura, a veces una romántica o bien desatarme con una salsa estilo afro con mucha percusión.
… En fin puedo preguntar muchas cosas, hasta quien vino primero el huevo o la Salsa.
Hablad con las teclas
Salsaludos
(Autor: Dunne)