Los zapatos de baile son muy bellos… y bastante costosos, eso es porque la calidad es alta y necesaria para que soporten la vida que les das… que no es nada fácil para un zapato.
Bailar salsa o bachata, al igual que el tango, exige gran destreza física, y unos zapatos que lo toleren… ya que con ellos:
- saltas
- caes
- bailas
- arrastras
- flexionas
- colocas tu peso sobre los metatarsos
- giras
- pivoteas
- te afirmas en los tacos
- los llevas al límite
Los zapatos de ensayo son muy buenos y soportan más que los de escenario, sin embargo, con estos últimos debes practicar aunque sea un poco, ya que hay que ablandarlos, domarlos y acostumbrarse a ellos.
Una solución efectiva para no arruinar tus zapatos de escenario y que sigan luciendo hermosos es protegerlos durante los ensayos:
- Puedes envolverlos en cinta de embalar de la siguiente forma: pega la cinta ancha de plástico a la suela del zapato y gírala para envolver la capellada o parte superior de forma que la parte con pegamento de la cinta quede hacia arriba y no toque tu bello zapato. Luego la pegas nuevamente en la suela logrando una superficie pegajosa sobre el zapato que cubrirás con una segunda capa de cinta de embalar, pegada a la parte que quedó pegajosa. Así logras una envoltura plástica que protege tu zapato para poder ensayar sin gastarlos
- Puedes cubrir el zapato de baile con un calcetín viejo, atravesando el taco y ajustándolo en el tobillo, si fuera necesario, con un elástico
Los zapatos de cuero, aunque no vayan a los ensayos, deben protegerse pasándoles abundante betún de vez en cuando para mantenerlos flexibles y humectados (además de bellos).
Existen betunes especiales para cuerinas o cuero sintético, y los hay también de todos colores.
Los zapatos de charol o falso charol se lustran con vaselina líquida, con este tratamiento logras que brillen, se mantengan sanos y no se peguen entre sí cuando los juntas bailando.
Si tus zapatos de baile te quedan un poco largos, o sea que la punta permanece vacía, rellénala con un poco de algodón o papel, para que no se marquen o deformen.
Si cuidas tus zapatos de baile ellos te cuidarán a ti…